Como ya sabéis, septiembre es momento para despedirnos de algunas series y darle la bienvenida a otras muchas, ya sean aquellas que añaden una temporada más a su historia o aquellas otras que se estrenan en la pequeña pantalla. De todo lo visto hasta ahora, destaca muy por encima 'Gotham', nueva apuesta de la cadena Fox que muestra al espectador la ciudad de Batman, pero sin Batman. Y todo justo en el 75 aniversario del nacimiento de este personaje icónico de DC Comics.
La serie comienza con el asesinato del matrimonio Wayne en presencia de su hijo Bruce (David Mazouz) en mitad de un callejón oscuro. Hasta ahí nada nuevo, ya que esta escena ha sido repetida en casi todas las películas del 'hombre murciélago'.
Lo novedoso de esta serie es que se centra en el joven inspector James Gordon (Ben McKenzie), quien más tarde se convertirá en el comisario de policía de Gotham, al tiempo que Bruce Wayne madura y se pone la máscara de Batman.
El piloto engancha, y mucho. En poco más de 40 minutos se nos presenta una acción completa, a la vez que conocemos a los personajes en torno a los que girará la trama durante esta primera temporada, que constará de 16 episodios. Personajes ya conocidos por los fanáticos de Bruce Wayne como Catwoman, el Pingüino, Enigma o el mayordomo más querido del mundo del cómic, Alfred. También aparecerán otros personajes desconocidos para el público como la cruel Fish Mooney (Jada Pinkett Smith). Ya sabemos, licencias que se toma la televisión.
Además, este primer capítulo introduce al espectador en el Gotham más oscuro, tal y como se trató de presentar a la ciudad desde las páginas de los cómics de Bob Kane y Bill Finger. La ciudad es dotada casi de vida propia, con un estilo consistente, a veces algo tétrico, evocando al Batman original concebido en los años 40 con el cine negro. No extraña para nada, que el nombre de la serie evoque a Gotham, la ciudad del pecado y del crimen que años más tarde Batman se encargará de proteger. Sin duda, este es el punto fuerte de esta nueva serie que no dejará indiferente a nadie (fan o no de los superhéroes de cómics).
Por ahora pocos fallos se le puede sacar a una serie que a penas lleva un par de episodios emitidos, y que pinta bien, muy bien. Tal vez un punto en contra que no me ha gustado ha sido como se esta retratando la relación entre el huérfano de Bruce y su mayordomo Alfred. Algunas escenas te hacen pensar: "Batman jamás le hablaría así a Alfred", pero claro nunca se ha escarbado tanto en la infancia de este personaje que, por otra parte, es uno de los mejor interpretados de la serie.
Otro de sus puntos fuertes es que esté protagonizada por James Gordon, uno de los personajes secundarios más queridos de los cómics, aliado de Batman en su cruzada contra el crimen. Un hombre de gran integridad que Mckenzie, al que conocimos en 'The O.C.', borda.
El tiempo dirá que pasa con esta historia, a la que por ahora auguramos una larga vida en la televisión.
¡No os la podéis perder!
La serie comienza con el asesinato del matrimonio Wayne en presencia de su hijo Bruce (David Mazouz) en mitad de un callejón oscuro. Hasta ahí nada nuevo, ya que esta escena ha sido repetida en casi todas las películas del 'hombre murciélago'.
Lo novedoso de esta serie es que se centra en el joven inspector James Gordon (Ben McKenzie), quien más tarde se convertirá en el comisario de policía de Gotham, al tiempo que Bruce Wayne madura y se pone la máscara de Batman.
El piloto engancha, y mucho. En poco más de 40 minutos se nos presenta una acción completa, a la vez que conocemos a los personajes en torno a los que girará la trama durante esta primera temporada, que constará de 16 episodios. Personajes ya conocidos por los fanáticos de Bruce Wayne como Catwoman, el Pingüino, Enigma o el mayordomo más querido del mundo del cómic, Alfred. También aparecerán otros personajes desconocidos para el público como la cruel Fish Mooney (Jada Pinkett Smith). Ya sabemos, licencias que se toma la televisión.
Además, este primer capítulo introduce al espectador en el Gotham más oscuro, tal y como se trató de presentar a la ciudad desde las páginas de los cómics de Bob Kane y Bill Finger. La ciudad es dotada casi de vida propia, con un estilo consistente, a veces algo tétrico, evocando al Batman original concebido en los años 40 con el cine negro. No extraña para nada, que el nombre de la serie evoque a Gotham, la ciudad del pecado y del crimen que años más tarde Batman se encargará de proteger. Sin duda, este es el punto fuerte de esta nueva serie que no dejará indiferente a nadie (fan o no de los superhéroes de cómics).
Por ahora pocos fallos se le puede sacar a una serie que a penas lleva un par de episodios emitidos, y que pinta bien, muy bien. Tal vez un punto en contra que no me ha gustado ha sido como se esta retratando la relación entre el huérfano de Bruce y su mayordomo Alfred. Algunas escenas te hacen pensar: "Batman jamás le hablaría así a Alfred", pero claro nunca se ha escarbado tanto en la infancia de este personaje que, por otra parte, es uno de los mejor interpretados de la serie.
Otro de sus puntos fuertes es que esté protagonizada por James Gordon, uno de los personajes secundarios más queridos de los cómics, aliado de Batman en su cruzada contra el crimen. Un hombre de gran integridad que Mckenzie, al que conocimos en 'The O.C.', borda.
El tiempo dirá que pasa con esta historia, a la que por ahora auguramos una larga vida en la televisión.
¡No os la podéis perder!
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