miércoles, 26 de febrero de 2014

'Tai Viginia', un reflejo de nuestra pérdida de memoria

Con Manuel Monteagudo.

Sevilla. Sala Cero. 20 de febrero. Y un frío que pela. Pero no importa, la noche no pudo ser mejor, ni tampoco la compañía.  El teatro, padre y madre del cine, nos esperaba, y yo encantada. 

Nos acercamos a una de las muchas salas pequeñitas que tiene Sevilla para disfrutar de un espectáculo que alguno ya había visto, pero al que se enfrentaba de nuevo con una sonrisa y dispuesto a pasarlo genial. Y así fue. Lo pasamos genial.

Sobre el escenario, Manuel Monteagudo, autor de la obra, actor único y principal, y representante de su propia compañía. Monteagudo venía a presentar 'Tai Viginia', una representación que lleva realizando desde hace más de 18 años.

Esta obra, con la que Monteagudo creó su propia compañía en 1996, es un monólogo escrito con suma maestría, en la que el sentido del humor se mezcla con un tono amargo, adentrándose en el tema de la soledad en la vejez y la locura en la que se ve inmersa una mujer enferma de alzheimer. Desde un punto de vista realista, esta obra toca la fibra sensible de los espectadores, mezclando de forma grandiosa el drama con la comedia. 

El actor sevillano interpreta a una anciana que vive sola y provoca las situaciones más surrealistas, mientras busca a Virginia, un personaje que nunca aparece, durante los más de 60 minutos que dura el montaje.

Esta tragicomedia, con guión y dirección de Monteagudo y Guillermo Rodríguez, se estrenó en 1996 y se ha representado por todo el país, siendo Sevilla la ciudad en la más representaciones se han ofrecido. Fue a partir de este montaje cuando Monteagudo decidió crear su propia compañía, y desde el principio convenció al público con el humor ácido con el que abordó el tema de la demencia.

Por esta interpretación única, el actor sevillano recibió diversos premios, como el de Mejor Actor Andaluz en Palma del Río en el 96, el Tercer Premio en el Certamen Nacional de Monólogos en 1997 o el de Mejor Actor en Chiclana. Además, poco después recibió el Premio Imperdible de Oro a la Trayectoria (2000), en el que tuvo mucho que ver su laureada transformación en la desamparada anciana de 'Tai Viginia' ('¿Estás ahí, Virginia?').

Sin duda, una obra más que recomendable para los amantes de las tragicomedias y el teatro. Un género que gracias a grandes ARTISTAS como Monteagudo sigue más vivo que nunca. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario