La moda es muy relativa, pero hay cosas que jamás dejan de gustar al público. La revista, The New Yorker, al parecer es una de ellas y lleva dando grandes muestras de verdadero periodismo desde febrero de 1925, con la publicación de su primera edición. Hoy, es una de las publicaciones más prestigiosas del mundo.
The New Yorker es uno de esos medios de comunicación que sigue creciendo pese al mal momento por el que pasa el mundo de las letras actualmente (en 1989 la tirada apenas superaba los 600.000 ejemplares, en 2011 ya superaba el millón).
Se trata de una revista ilustre que es capaz de mezclar periodismo de calidad con buenas dosis de ficción, que sobrevive a un tiempo en el que los lectores estadounidenses prefieren las ediciones digitales a los periódicos de edición impresa considerados pasados. Hoy, más de un millón de suscriptores reciben semanalmente en sus correos electrónicos esta revista tan querida por los neoyorquinos.
La pregunta que muchos se hacen es, ¿cuál es el secreto de The New Yorker? Y tiene una respuesta muy fácil. El periodismo de calidad no parece estar de moda entre aquellos nuevos comunicadores y es eso, precisamente, lo que ofrece The New Yorker a sus lectores. Eso y las grandes plumas que han pasado por su redacción: Truman Capote, Leonard Cohen, John Cheever, Raymond Carver..., parecen su gran secreto.